Seguridad logística de contenedores: un enfoque de IA

Cuando abres la puerta de tu nevera, es probable que muchas de las cosas que ves vengan desde otra parte del mundo en un contenedor. Incluso el propio frigorífico puede haber viajado desde muy lejos. Por este motivo, los buques de contenedores son cada vez más grandes a medida que pasa el tiempo y actualmente alcanzan la asombrosa cifra de 24.000 contenedores en un solo barco.

Toda la logística y la cadena de suministro de la mayoría de los productos depende de los contenedores estandarizados de 20 o 40 pies (6 o 12 metros). Pero rastrear esa cantidad de cajas de acero que entran y salen de los barcos, suben y bajan de camiones o se cargan y descargan de trenes no es fácil. No desde el principio de su viaje hasta el final del mismo. Ni siquiera dentro de alguno de los puertos por los que puedan pasar en sus viajes. Afortunadamente, hoy en día todos los contenedores tienen lo que se llama un “número BIC” único, donde BIC es la Oficina de Contenedores Internacionales (Bureau of International Containers).

Esta serie de letras y números identifican claramente a cada contenedor, por lo que se puede rastrear de principio en todo momento sin problemas. O casi sin problemas. Porque la gran cantidad de contenedores en circulación es un problema en sí mismo. Seguir manualmente el contenido del barco más grande actualmente (24.000 contenedores) es sencillamente imposible. Por eso, desde hace unos años, hay cámaras en las grúas, entradas y salidas del puerto y en todo el recinto portuario, para controlar el número BIC, a fin de saber siempre dónde fue visto por última vez un determinado contenedor. Y estos sistemas se han mejorado en los últimos años con visión artificial que es capaz de leer el número BIC y registrar el contenedor que aparece frente a esa cámara en particular, para poder buscarlo, y si es necesario, localizar dónde está.

Ya hemos mencionado la extensa red de cámaras con la que cuenta cada puerto en la actualidad, para controlar las operaciones que se realizan en el territorio portuario. Y también hemos hablado código BIC. Si juntamos ambos y agregamos algo de inteligencia artificial a la mezcla, obtendremos una plataforma de monitoreo de contenedores en tiempo real que puede indicarte en todo momento dónde está exactamente un determinado contenedor.

Una de estas plataformas es nuestra propia Videoma, que estamos ampliando para incluir funcionalidades de seguimiento logístico, utilizando los mismos analizadores de IA que ya empleamos con éxito en las fuerzas de seguridad, el ejército y otras tareas relacionadas con la seguridad.

El proceso comienza cuando el contenedor se descarga de un barco. La grúa tiene una cámara que registra el número BIC y lo pasa al sistema, que está conectado al VMS del puerto (sistema de gestión de video) que recibe todas las transmisiones de las cámaras y lee el número BIC con un módulo OCR/ALPR especializado (adaptado al formato BIC). Al mismo tiempo, el sistema registra la cámara que proporciona esa información, así como la hora actual.

Si el contenedor se almacena temporalmente en el puerto, el transportador suele tener también una cámara para registrar el movimiento. Si el contenedor va en camión, el sistema registra la matrícula del camión durante la carga y descarga, junto con el BIC, para mantener ambos números asociados. Esto permite un control exhaustivo en cualquier momento, utilizando la infraestructura que ya existe en el puerto, pero mejorándola con un sistema de seguimiento automatizado que se encarga de todo.

En caso de pérdida de un contenedor, es fácil encontrar en el sistema las últimas imágenes del mismo, junto con la última cámara que identificó el BIC. Como tanto la entrada como la salida del puerto también cuentan con cámaras, es fácil saber si el contenedor todavía se encuentra en el recinto portuario o ha sido retirado. La plataforma se puede utilizar desde el móvil, lo cual resulta muy conveniente cuando se está in-situ.